Desde entonces mi mente se dirigía directo con el pensamiento sobre ese Padre que buscaba en el firmamento. A los 21 años, visite una escuela o cátedra de Espiritismo (Emecu) los domingos para visitantes. Pero antes de recibir esa invitacion por un miembro de ella, había leido como cuatro libros sobre el tema, Los que desde la primera lectura "Por los fueros del espíritu" Psicología del espíritu" de David Grossvater, "Levantando la cortina" "Rumbos Humanos" de Rodolfo Benavides, me ayudaron para entender la filosofia y doctrina desde el primer domingo que asisti a sesión.Tanto, que ya podía tomar la palabra para emitir un juicio o razonamiento. ya que se leía una de las primeras anotadas.
De mi parte fui leyendo por grados las obras de Joaquin Trincado y presentando por escrito un examen en dos paginas para demostrar en sintesis que había leido la obra. Entre ellas, "Buscando a Dios", Jesús hombre y no Dios" El Espiritismo en su Asiento" " Espiritismo Estudiado" "Filosofía Austera Racional" "Los Cinco Amores" "El Magnetismo en su Orígen" "Los Extremos se Tocan" y "Conocete a ti mismo" entre otras.
Debo decir que formé parte del Consejo y titulares de la Cátedra. Desde los primeros años presencié fenómenos mediumnímicos, como la posesion y desarrollo de mediums, medium escribientes, comunicaciones que grababa y luego como secretario tenia que copiarlas a máquinas Todo ello me formó mi convicción sobre la existencia de un solo Ser, nuestro Padre en espíritu y Verdad, No es personal. Lo adoramos solo con el pensamiento, comprendemos que nuestro espíritu es una partícula de ese gran Ser. Inmortales somos por que la heredamos y el universo es nuestra patria, a la cual regresamos, como el buzo de mar que al salir de las profundidades, se quita los implementos y regresa a casa.